martes, 26 de septiembre de 2023

El Libre Arbitrio en la Doctrina Espiritual de santa Teresa de Ávila - Elena Calderón de Cuervo

El Libre Arbitrio en la Doctrina Espiritual de santa Teresa de Ávila
Elena Calderón de Cuervo


Décimo primera Conferencia del XVII Curso Anual 2023 del Centro Pieper titulado «Aproximación a los Doctores de la Iglesia».


[Centro Pieper] El Centro de Humanidades Josef Pieper de Mar del Plata (Argentina), tiene el agrado de invitarlos a participar de la transmisión de la Conferencia de la Dra. Elena Calderón de Cuervo titulada “El Libre Arbitrio en la Doctrina Espiritual de santa Teresa de Ávila”

Esta Conferencia se transmitirá en vivo el próximo viernes 29 de Septiembre a partir de las 19:30hs de Argentina. 

Podrá ser vista gratuitamente por el Canal de YouTube del Centro Pieper en el siguiente enlace:

O a través de la pantalla que se encuentra a continuación:


¿Te la vas a perder?

Santa Teresa de Ávila «nació en Ávila (España). En la adolescencia la lectura de libros profanos la conduce a una vida mundana, pero posteriormente la lectura de autores espirituales “la inician en el recogimiento y la oración. A los veinte años entra en el monasterio carmelita de la Encarnación, en Ávila”.

“Paralelamente a la madurez de su vida interior, la Santa comienza a desarrollar concretamente el ideal de reforma de la Orden Carmelita: en 1562 funda en Ávila, con el apoyo del obispo de la ciudad, don Álvaro de Mendoza, el primer Carmelo reformado. En los años siguientes prosigue las fundaciones de nuevos Carmelos, en total diecisiete. Es fundamental el encuentro con San Juan de la Cruz, con quien, en 1568, en Duruelo, cerca de Ávila, funda el primer convento de Carmelitas Descalzos”. La santa muere en 1582. Fue beatificada por Pablo V en 1614, canonizada por Gregorio XV en 1622 y proclamada Doctora de la Iglesia por el Siervo de Dios Pablo VI en 1970.

“Teresa de Jesús es una verdadera maestra de vida cristiana para los fieles de todos los tiempos. En nuestra sociedad, a menudo carente de valores espirituales, Santa Teresa nos enseña a ser testigos incansables de Dios, de su presencia y de su acción”».


lunes, 25 de septiembre de 2023

Catequesis sobre Santa Teresa de Ávila - Benedicto XVI

Catequesis sobre Santa Teresa de Ávila
Benedicto XVI


Audiencia General correspondiente al Miércoles 2 de Febrero de 2011


A lo largo de las catequesis que he querido dedicar a los Padres de la Iglesia y a grandes figuras de teólogos y de mujeres del Medievo me detuve también a hablar de algunos santos y santas que fueron proclamados doctores de la Iglesia por su eminente doctrina. Hoy quiero iniciar una breve serie de encuentros para completar la presentación de los doctores de la Iglesia. Y comienzo con una santa que representa una de las cimas de la espiritualidad cristiana de todos los tiempos: santa Teresa de Ávila (de Jesús).

Nace en Ávila, España, en 1515, con el nombre de Teresa de Ahumada. En su autobiografía ella misma menciona algunos detalles de su infancia: su nacimiento de «padres virtuosos y temerosos de Dios», en el seno de una familia numerosa, con nueve hermanos y tres hermanas. Todavía niña, cuando tiene menos de nueve años, lee las vidas de algunos mártires que le inspiran el deseo del martirio, hasta el punto de que improvisa una breve huida de casa para morir mártir y subir al cielo (cf. Vida 1, 5); «quiero ver a Dios» dice la pequeña a sus padres. Algunos años más tarde, Teresa hablará de sus lecturas de la infancia y afirmará que en ellas descubrió la verdad, que resume en dos principios fundamentales: por un lado «el hecho de que todo lo que pertenece al mundo de aquí, pasa»; y, por otro, que sólo Dios es «para siempre, siempre, siempre», tema que se reitera en la famosísima poesía «Nada te turbe / nada te espante; / todo se pasa. / Dios no se muda; / la paciencia todo lo alcanza; / quien a Dios tiene / nada le falta / ¡Sólo Dios basta!». Al quedar huérfana de madre a los 12 años, pide a la santísima Virgen que le haga de madre (cf. Vida 1, 7).

Aunque en la adolescencia la lectura de libros profanos la había llevado a las distracciones de una vida mundana, la experiencia como alumna de las religiosas agustinas de Santa María de las Gracias de Ávila y la lectura de libros espirituales, sobre todo clásicos de la espiritualidad franciscana, le enseñan el recogimiento y la oración. A la edad de 20 años, entra en el monasterio carmelita de la Encarnación, también en Ávila; en la vida religiosa toma el nombre de Teresa de Jesús. Tres años después, enferma gravemente; tanto que permanece cuatro días en coma, aparentemente muerta (cf. Vida 5, 9). Incluso en la lucha contra sus enfermedades la santa ve el combate contra las debilidades y las resistencias a la llamada de Dios: «Deseaba vivir –escribe–, que bien entendía que no vivía, sino que peleaba con una sombra de muerte, y no había quien me diese vida, y no la podía yo tomar; y quien me la podía dar tenía razón de no socorrerme, pues tantas veces me había tornado a sí y yo dejándole» (Vida 8, 2). En 1543 pierde la cercanía de sus familiares: su padre muere y todos sus hermanos emigran, uno tras otro, a América. En la Cuaresma de 1554, a los 39 años, Teresa alcanza la cima de la lucha contra sus debilidades. El descubrimiento fortuito de la estatua de «un Cristo muy llagado» (Vida 9, 1) marca profundamente su vida. La santa, que en aquel período encuentra profunda consonancia con el san Agustín de las Confesiones, describe así el día decisivo de su experiencia mística: «Acaecíame... venirme a deshora un sentimiento de la presencia de Dios, que en ninguna manera podía dudar que estaba dentro de mí, o yo toda engolfada en él» (Vida 10, 1).


Santa Teresa de Ávila, Doctora de la Iglesia


lunes, 18 de septiembre de 2023

El Doctor Místico: san Juan de la Cruz - P. Ignacio Andereggen

El Doctor Místico: san Juan de la Cruz
P. Ignacio Andereggen


Décima Conferencia del XVII Curso Anual 2023 del Centro Pieper titulado «Aproximación a los Doctores de la Iglesia».


[Centro Pieper] El Centro de Humanidades Josef Pieper de Mar del Plata (Argentina), tiene el agrado de invitarlos a participar de la transmisión de la Conferencia del Pbro. Dr. Ignacio Andereggen titulada “El Doctor Místico: san Juan de la Cruz”

Esta Conferencia se transmitirá en vivo el próximo jueves 21 de Septiembre a partir de las 20:30hs de Argentina. 

Podrá ser vista gratuitamente por el Canal de YouTube del Centro Pieper en el siguiente enlace:

O a través de la pantalla que se encuentra a continuación:


¿Te la vas a perder?


San Juan de la Cruz nació «en Fontiveros, cerca de Ávila, en 1542, de una familia pobre, ingresó como carmelita en Medina del Campo. En 1567 fue ordenado sacerdote. Con motivo de la celebración de su primera misa se encontró por primera vez con Teresa, que “le expuso su plan de reforma del Carmelo”.
Al renovar su profesión religiosa adoptó el nombre “de la Cruz”. San Juan colaboró estrechamente con ella en la reforma, “lo que le supuso graves sufrimientos”, llegando incluso a ser encarcelado por una acusación injusta.
Mientras se preparaba para viajar a México, enfermó gravemente y murió en diciembre de 1591. Fue beatificado por Clemente X en 1675 y canonizado por Benedicto XIII en 1726» (Benedicto XVI).
 
 

domingo, 17 de septiembre de 2023

Catequesis sobre San Juan de la Cruz - Benedicto XVI

Catequesis sobre San Juan de la Cruz
Benedicto XVI


Audiencia General correspondiente al Miércoles 16 de Febrero de 2011


Hace dos semanas presenté la figura de la gran mística española Teresa de Jesús. Hoy quiero hablar de otro importante santo de aquellas tierras, amigo espiritual de santa Teresa, reformador, junto a ella, de la familia religiosa carmelita: san Juan de la Cruz, proclamado doctor de la Iglesia por el Papa Pío XI, en 1926, y llamado Doctor mysticus, «doctor místico», en la tradición [Nota del Centro Pieper: las “negritas” son nuestras].

Juan de la Cruz nació en 1542 en el pequeño pueblo de Fontiveros, cerca de Ávila, en Castilla la Vieja, de Gonzalo de Yepes y Catalina Álvarez. La familia era muy pobre, porque al padre, de noble origen toledano, le habían echado de casa y desheredado por haberse casado con Catalina, una humilde tejedora de seda. Huérfano de padre en tierna edad, Juan, a los nueve años, se trasladó con su madre y su hermano Francisco a Medina del Campo, cerca de Valladolid, centro comercial y cultural. Allí frecuentó el Colegio de los Doctrinos, desempeñando también algunos humildes trabajos para las hermanas de la iglesia-convento de la Magdalena. Sucesivamente, dadas sus cualidades humanas y sus resultados en los estudios, fue admitido primero como enfermero en el Hospital de la Concepción, después en el Colegio de los Jesuitas que se acababa de fundar en Medina del Campo: aquí Juan entró con dieciocho años y estudió durante tres años humanidades, retórica y lenguas clásicas. Al final de la formación, tenía muy clara su vocación: la vida religiosa, y entre las numerosas órdenes presentes en Medina se sintió llamado al Carmelo.

En el verano de 1563 inició el noviciado en los Carmelitas de la ciudad, asumiendo el nombre religioso de Juan de San Matías. Al año siguiente fue destinado a la prestigiosa Universidad de Salamanca, donde estudió durante un trienio artes y filosofía. En 1567 fue ordenado sacerdote y regresó a Medina del Campo para celebrar su primera misa rodeado del afecto de sus familiares. Precisamente aquí tuvo lugar el primer encuentro entre Juan y Teresa de Jesús. El encuentro fue decisivo para ambos: Teresa le expuso su plan de reforma del Carmelo, también en la rama masculina de la Orden, y propuso a Juan que se adhiriera «para mayor gloria de Dios»; el joven sacerdote quedó fascinado por las ideas de Teresa, tanto que se convirtió en un gran defensor del proyecto. Los dos trabajaron juntos algunos meses, compartiendo ideales y propuestas para inaugurar lo antes posible la primera casa de Carmelitas Descalzos: la apertura tuvo lugar el 28 de diciembre de 1568 en Duruelo, un lugar solitario de la provincia de Ávila. Formaban esta primera comunidad masculina reformada, junto a Juan, otros tres compañeros. Al renovar su profesión religiosa según la Regla primitiva, los cuatro adoptaron un nuevo nombre: Juan se llamó entonces «de la Cruz», como será universalmente conocido más tarde. A finales de 1572, a petición de santa Teresa, se convirtió en confesor y vicario del monasterio de la Encarnación de Ávila, donde la santa era priora. Fueron años de estrecha colaboración y amistad espiritual, que enriqueció a ambos. Asimismo, se remontan a aquel período las obras teresianas más importantes y los primeros escritos de Juan.


San Juan de la Cruz, Doctor de la Iglesia
Benedicto XVI


miércoles, 6 de septiembre de 2023

El Espíritu de la Teología Tomista [Modalidad Presencial y Virtual] - Mario Caponnetto

El Espíritu de la Teología Tomista
Mario Caponnetto


Novena Conferencia del XVII Curso Anual 2023 del Centro Pieper titulado «Aproximación a los Doctores de la Iglesia».


[Centro Pieper] El Centro de Humanidades Josef Pieper de Mar del Plata (Argentina), tiene el agrado de invitarlos a participar de la transmisión de la Conferencia del Dr. Mario Caponnetto titulada “El Espíritu de la Teología Tomista”

Esta Conferencia se transmitirá en vivo el próximo viernes 8 de Septiembre a partir de las 19:30hs de Argentina [Además, para quienes vivan en la ciudad de Mar del Plata y zona, tendrán la posibilidad de participar en forma presencial de esta conferencia en el Multiespacio Cultural EL CAMINO, Santiago del Estero 3965].

Podrá ser vista gratuitamente por el Canal de YouTube del Centro Pieper en el siguiente enlace:


O a través de la pantalla que se encuentra a continuación:


¿Te la vas a perder?


Santo Tomás de Aquino «nació a principios de 1225 en el Castillo de Rocaseca, cerca de Aquino. Su padre, Landulfo, descendiente de los condes de Aquino, era señor de Rocaseca, y su madre, Teodora, era hija de los condes de Chieti. El matrimonio tuvo 12 hijos, siete varones y cinco mujeres. Tomás era el más pequeño de los varones.

Cuando tenía cinco años entró como oblato en el Monasterio de Montecasino, del que era abad Landulfo Sinibaldi, pariente de la familia, y allí permaneció nueve años, durante los cuales aprendió las primeras letras, la gramática latina y la italiana, la música, la poesía y la salmodia. El ambiente religioso en que vivía despertó en él una gran curiosidad por las cosas divinas. Preguntaba con frecuencia a sus maestros: quid est Deus?, ¿qué es Dios?

En 1239, Federico II se apoderó de Montecasino, expulsando de allí a los monjes, y convirtiéndolo en fortaleza. El joven Tomás tuvo que abandonar el Monasterio, y fue enviado a continuar sus estudios en la Universidad de Nápoles, que había sido fundada por el mismo Federico II el año 1224. Allí estudió el trivio con Pedro Martín de Dacia, y el quadrivio con Pedro de Hibernia. Durante sus estudios conoció a los dominicos, y tras la muerte de su padre, acaecida en 1243, pidió en 1244 el ingreso en la Orden. Tenía entonces muy cerca de los diecinueve años…

Poco después fue enviado a París, donde permaneció hasta 1248, estudiando bajo la dirección de Alberto Magno. Siguió a éste ese mismo año hasta Colonia, donde acababa de abrirse un nuevo Estudio General de la Orden, del que fue nombrado regente el propio Alberto, y allí prosiguió sus estudios hasta terminarlos en 1251, año en el que fue ordenado sacerdote. A esa etapa de sus estudios en Colonia corresponde la anécdota del apodo que le pusieron algunos de sus condiscípulos. Le llamaban el buey mudo de Sicilia, dada su gran estatura y su silencio y concentración. Pero bien pronto dio muestras de su extraordinario talento, en un acto escolástico del que fue protagonista. Alberto Magno, al finalizar dicho acto, exclamó: «Llamáis a éste el buey mudo, pero yo os aseguro que este buey dará tales mugidos con su doctrina que resonarán en el mundo entero»…

Murió el 7 de marzo de 1274 en la Abadía de Fosanova, cuando se dirigía, por orden del Papa, a tomar parte en el Concilio de Lyon» (Jesús García López)